MAS DE 8 MIL MILLONES SIN ACLARAR, DEL SEXENIO ANTERIOR

 

 

-Se deba pasar de las palabras a los  hechos

-No debe haber impunidad

-El PAN aprueba dedazo y dice que es democracia

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Raúl Hernández Moreno

La administración estatal que encabezó Francisco García Cabeza de  Vaca no sustentó el  gasto de  8 mil 354 millones de pesos  y la Contraloría Gubernamental de Tamaulipas carece de documentación para aclararlo.

Este  faltante  fue detectado y denunciado por la asociación civil “Mexicanos contra la corrupción” y corresponde ahora a la Auditoría Superior de la Federación  establecer  responsabilidades y fincar cargos legales contra los culpables.

Los montos no aclarados corresponden a las cuentas públicas 2021 y 2022  y fueron detectados principalmente en las Secretaría de Educación, Bienestar Social Salud, Administración, Finanzas, Obras Públicas. También en el IETAM, Comisión Estatal de Derechos Humanos, la Fiscalía General de Justicia, ITABEC.

Hay también  irregularidades en las cuentas de municipios como Jaumave, Valle Hermoso, San Fernando, Casas y Palmillas,

El sexenio cabecista se distinguió por su opacidad  y por el despilfarro de recursos.

Está bien que públicamente se  informe de las irregularidades  detectadas en el sexenio cabecista, pero la sociedad ya se está cansando de escuchar lamentos y protestas y quiere que de las palabras se pase a los  hechos y que Cabeza  y su grupo selecto de  bandidos sean enjuiciados.

No debe haber  impunidad, pero mientras todo quede en una chamusquina  habrá  funcionarios  interesados en corromperse, con la confianza de que nadie los llevará a  juicio y que su castigo se limitará a llamarlos  bandidos, lo que lejos de incomodarlos, es  una caricia al ego.

Mientras no se toque las fortunas mal habidas, a los  funcionarios  transas les tiene sin cuidado que la sociedad los criminalice.

Por otra parte, de  risa loca son las declaraciones de los decadentes líderes del PAN, Luis René Cacharro Cantú e Imelda Sanmiguel Cantú, que anunciaron que el partido designará a los candidatos a alcaldes y diputados.

Es decir, se les  impondrá por dedazo y los dos cínicos  tienen la desvergüenza de  afirmar que de esta forma el PAN se democratiza y transparenta su proceso de selección de candidatos.

¿De cuándo acá la imposición de candidatos se convirtió en democracia?

¿Qué no se pasó el PAN  más de 90 años denunciando el dedazo en el PRI? ¿O será porque  ahora el PAN y el PRI van  juntos, que el dedazo se democratizó?

De veras que los panistas se pasan. Se verían más decentes admitiendo que habrá dedazo porque a estas alturas es difícil encontrar candidatos, porque ante la certeza de que  van a perder las elecciones del 2024, nadie quiere abanderar las causas azules.

No se trata de seleccionar al mejor, sino al que  haya. El PAN regresó a sus tiempos opositores, en que durante las campañas batallaban para encontrar osados que quisieran ser candidatos y batallaban para encontrar quién les  financiara la campaña.  Antes se peleaban los primeros lugares en la lista de regidores y en el 2024 se repetirá  la   historia. El PAN no va a competir por las alcaldías, sino por las regidurías de minoría.

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